Los cuentos de Toño Marcano y Carlos Eduardo Gómez en la carretera
MÉRIDA – El fútbol es el deporte más popular del mundo, el que más genera pasión, emoción y es capaz de unir o separar a todo un país. Pero también, es el más sencillo, el que se juega en la cuadra con un bote de jugo, una lata de refresco o cualquier esférico improvisado. Esta sencillez apasionante es la que lleva a sus participantes a formar amistades para toda la vida.
Una prueba de esto es la que une a Carlos Eduardo Gómez y Antonio “Toño” Marcano. Tuve la dicha de viajar junto a ellos vía terrestre para los conversatorios a las ciudades de San Cristóbal y Mérida. Esa camaradería, ese compartir un desayuno en la carretera, entre otras cosas que solo un vínculo como el fútbol puede crear.
¿Lo mejor del viaje junto a estos dos personajes de nuestro fútbol nacional? Sin duda alguna las anécdotas.
Una de ellas contada por Carlos Eduardo Gómez es sobre como adquiere legalmente el nombre Estudiantes de Mérida.
Era el año 1958, en la ciudad de Caracas nace un club bajo el nombre Estudiantes de Loyola, este equipo tomaba el lugar del Loyola, por prohibición de la institución educativa. Este club jugó dos años bajo ese nombre, dicho equipo militaba en la Primera División del profesional. El club Loyola no permitió que jugará con ese nombre, solo podían usar los mismos colores: el albirrojo.
Carlos Eduardo Gómez conoce muy bien esa historia ya que militaba en ese conjunto cuando él estudiaba en el Colegio San José de la ciudad de Mérida. “La institución educativa me permitía jugar con el equipo de la capital, pero solo si los juegos eran los días sábado y domingo. Si tocaba uno entre semana, no podía ir”.
El convenio para la cesión del nombre se dá en 1971 con la fundación de el Estudiantes de Mérida, luego de una reunión entre Guillermo Soto Rosa, Ramón Chiarelli, Manuel Padilla, Amarís Cañizales, Luis Jiménez Ron, José De Arano y Pedro Rincón. Ellos le compran la franquicia al conjunto capitalino. Y desde ese momento el Estudiantes de Mérida que ya había sido fundado pasa a utilizar el nombre siendo además considerado el equipo del pueblo merideño.
Otra de las curiosidades en este entretenido viaje fue cortesía del doctor Toño Marcano que le dice a su copiloto. ¿Te acuerdas ese juego en Curaçao donde casí nos linchan?
Ese día, Marcano y Gómez defendían los colores de nuestra selección nacional en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en 1969.
El ginecólogo nos cuenta que luego del pitazo final los jugadores venezolanos tuvieron que atrincherarse en el camerino para no ser linchados por los simpatizantes del combinado local. Todo eso nace a raíz de un penalti que pitan a favor de los venezolanos. Donde los integrantes del equipo rival elegaban que no existía la falta y a raíz se genera una reyerta en la cancha. Y la molestía de los fanáticos presentes en el recinto deportivo.
Ese día, lo insólito fue que la policía del país caribeño fue al camerino de la vinotinto a buscar a algunos jugadores para que subieran a la grada para hablar con los hinchas. Uno de los futbolistas que subió fue Marcano. Que confiesa que estaba preocupado por su integridad física. Al final subieron Carlos Eduardo Gómez y Antonio Marcano. Afortunadamente no pasó a mayores y todo término de una manera pacífica.
De Fioravante De Simone
coordinador y editor
Venezuela Fútbol