Avaricia y desorganización en CPA Cup denuncia madre de un jugador
por Gabriel Capriles (Exclusivo)
La madre de un futbolista menor lo reconoció.
«CPA es puro real y desorganización» dijo Carolina, una de las tantas mamás molestas con lo que están viviendo en el torneo privado de la Casa Portuguesa, avalado por la Asociación.
Hasta ayer a altas horas de la noche los organizadores no habían entregado una camiseta que se prometió en la inscripción de la copa, que por cierto costó 60 dólares por niño más el pago por equipo.
También se quejaron duramente del arbitraje, especialmente del principal Abraham Pérez, por decisiones que enardecieron a los representantes.
En este aspecto Cabrujas le decía a los entrenadores «no se puede justificar una derrota por una decisión de un arbitro», pero donde no hay contraloría todo puede suceder, además que hay árbitros muy malos en su accionar.
«Tenemos derecho a quejarnos porque somos nosotras y los papás de los muchachos los que pagamos estos eventos», señaló Carolina, quien fustigó a los organizadores a los que tildó de avariciosos.
Reflexión
El año pasado y según una fuente digna de todo crédito, CPA Cup generó 50 mil dólares de ganancia neta, y este año la participación dobló las expectativas en equipos.
Imaginen ustedes y saquen cuentas.
«Es triste ver en lo que se ha convertido el futbol menor con esta proliferación de torneos privados, donde quizás el que más come es el ente asociativo».
Es el balompié menor de estos tiempos.
Un gran negocio para pocos, donde no se habla de formación, fomento, desarrollo o educación, como sí se hacia en la época de oro de la Liga Menor.
Ahora se habla de dólares, de transacciones y de «Cuanto hay pa’eso»
Mientras unos vivos llenan sus alforjas, el fútbol menor de los barrios está más olvidado que nunca, y esa es la gran injusticia en todo esto.